IATA está liderando un proyecto de coordinación a nivel mundial para desarrollar un pool de tripulaciones, de la mano de todas las compañías aéreas, que permita que los tráficos de carga aérea, prioritarios y únicos en muchos países ahora ahora mismo, no se frenen y se puedan operar pese a la complejidad que genera el origen/destino combinado de estas rutas.