| No es fácil, y más en los tiempos que corren, encontrar una empresa familiar que no solo consiga sobrevivir al temporal económico sino que además crezca y se expanda. Son casos contados los que capean estas tormentas pero uno de ellos está aquí, en Castilla y León. En concreto en la localidad segoviana de Chañe donde se encuentra Viveros El Pinar, una empresa con más de cuatro décadas de historia y que en la actualidad aúna tecnología, curiosidad, desarrollo y experiencia a partes iguales La segunda generación de este negocio -aunque la primera también está en activo-, lleva ahora las riendas de una forma de producir, la del cultivo de fresa en viveros, pionera en su caso en España, cuando ver viveros en el campo era una fotografía inusual. Sus líneas de negocio se centran en dos bloques, la producción de planta de fresa y la producción de fruta para el consumidor final. En la producción para otros agricultores trabajan no solo en España sino para otros países como Marruecos, Portugal o Finlandia.
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